Acualmente en "atrévete a pensar con libertad"

martes, enero 31, 2006

FUMANDO ESPERO, LA OPOSICIÓN QUE YO QUIERO.


España al borde del precipicio y, para evitarlo, entre las geniales ideas que se le ocurren a la oposición se encuentra la de, a modo de colegial chivato, ir a decirle al profe que los compis fuman a escondidas.

A mí, Sr. Rajoy, me importa poco que ZP y Mas se fumaran un cartón de cigarrillos cada uno, o dos cajas de puros habanos, o para aguantar la larga negociación (metafóricamente hablando) se hincharan de masticar hojas de coca gentileza del compañero cocalero Evo Morales. Lo que me preocupa son los acuerdos a los que llegaron.

Céntrese Sr. Rajoy y no derroche esfuerzos; dedíquese a explicar las consecuencias reales del “Estatut”, a entonar el “mea culpa” por las cesiones al nacionalismo en el pasado y en el presente (Piqué, estatuto valenciano....), y a sacar adelante el referéndum propuesto para que, al menos, se decida lo que se decida, sea el pueblo soberano el que tenga la última palabra.

No sé cuantos cigarros se fumó Sara Montiel mientras cantaba lo de “fumando espero, al hombre que yo quiero”, pero seguro que si fumando esperamos la oposición que queremos, nos vamos a fumar muchos, pero que muchos cartones.

1 comentarios:

Alberto Tarifa Valentín-Gamazo dijo...

Sobre todo si eseramos que la oposición la hagan estos... ;-((